No hay cortejo comparable para ti,
alma melancólica, a esta multitud
de ecos silenciados, galería monótona
que la quietud repite y obstinada refleja
sus trastornados ritmos.
alma melancólica, a esta multitud
de ecos silenciados, galería monótona
que la quietud repite y obstinada refleja
sus trastornados ritmos.
No siempre hay que creer lo que el espejo dice.
Tu rostro verdadero puede ser cualquier máscara.
Tu rostro verdadero puede ser cualquier máscara.
Ana Rosseti
Es hora de quitarse máscaras, cuánto más felices seríamos, no? Un abrazo muy grande.
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